Chevrolet Spark
Las ventajas
- La ligera caja de cambios permite conducción por ciudad sin complicaciones
- Buen desempeño en línea recta
- Un precio razonable para un modelo de baja gama
- Costes de mantenimiento bajos
Las desventajas
- La conducción sigue siendo bastante pobre
- La dirección de sistema hidráulico hace que aparcar sea un esfuerzo
- Los motores son demasiado ruidosos y bastos
Descripción
Los predecesores de la presente, tercera generación del Chevrolet Spark se conocían como el Daewoo Matiz en Europa. Evidentemente el pobre desempeño de este modelo, que incluía la tendencia a deslizarse al tomar las curvas, llevó a la división de marketing a rebautizarlo. Veamos cuánto ha cambiado.
Spark Mk1 (2009- presente):
El Chevrolet Spark sin lugar a dudas se ve diferente desde fuera, es mucho más jugoso que el previo Matiz, y aunque el estilo no es precisamente bonito, tiene un toque moderno. El tamaño es el área en la que realmente ha cambiado, tanto en términos de estructura como de motor. El Spark es relativamente espacioso para un coche urbano, y te ofrece una sorprendente cantidad de espacio de almacenamiento y una experiencia aceptablemente cómoda para los pasajeros.
Los tamaños del motor han incrementado en el Spak, con 1.2 litros gasolina disponible además del 1.0 litros que ya existía en el Matiz. Hay que decir que para un motor de cuatro cilindros es increíblemente burdo. Si lo que buscas es un coche silencioso que se conduzca como la seda, este no es el coche que buscas. Su desempeño en línea recta es adecuado sin embargo, lleva el paso con la mayoría de los otros coches de 1.2 litros de su clase. La caja de cambios también es una sorpresa agradable: es ligera y fácil de manipular. Esto es muy importante para un coche de ciudad.
Una característica importante que brilla por su ausencia es la manejabilidad. Tiene una dirección de sistema hidráulico, una antigualla para los tiempos que corren. Es verdad que transmite bien la percepción de peso al volante, pero aparcar cuesta lo suyo. Los problemas de manejabilidad heredados del catastrófico Matiz han mejorado, pero están lejos de haber sido superados. Hay mucho contoneo para un coche pequeño, y la configuración hace poco por inspirar confianza en las curvas.
Conclusión
El Spark sí que es competitivo en el precio, es muy barato, al fondo de la gama. Aún así, por el mismo precio puedes optar por un modelo más viejo de la competencia, que le supera. En comparaciones con otros coches de ciudad como el Toyota Yaris, Hyundai i10 or Kia Picanto, simplemente no llega. No es lo suficientemente refinado o un pack lo bastante completo.